viernes, 14 de septiembre de 2012

Ey, ¡te quiero!

 Gracias por cada momento a tu lado, princesa. Digan lo que digan; eres distinta a las demás. Te preocupas por mí como nadie más lo haría, me dices lo que es bueno para mí y lo que no, estás ahí no para caerte conmigo, sino para levantarme. Contigo nada es malo, se me hace raro decir esto, pero no sé porque extraña razón, eres de las pocas personas que consigue sacarme de mi misma y eso a veces me sienta bien.

Jo, princesa, no son noches, son grandes noches, son locuras de salir por ahí en shorts y en tirantes para morirse de frío o de salir de fiesta a nuestra manera cuando todo el mundo dice vais a pasar frío. A mi me da igual pasar frío o lo que sea , porque siempre voy a tener a alguien en quien abrazarme. Siempre voy a tener a alguien con quien bailar bajo la lluvia.


Y es que yo te voy a esperar, como toca tras cada despedida, es lo que toca, es la jodida distancia que nos separa, la misma que nos hace fuertes. Y es que es así , idiota, es así , somos causa del destino y aquí estamos para ser felices juntas.


No hay comentarios:

Publicar un comentario